Información básica sobre la ATR

Qué es la ATR?

La ATR es un trastorno en el proceso de filtración de la sangre en los riñones. La Acidosis significa cualquier aumento en la acidez de la sangre: la ATR es aquella que se origina en los Túbulos de los Riñones, los cuales no logran mantener el equilibrio bioquímico y devuelven ácido a la sangre en lugar de eliminarlo en la orina.

La ATR en niños suele deberse a inmadurez de los riñones al nacer, aunque los síntomas pueden tardar en manifestarse. En adultos, la ATR es provocada por otras enfermedades, como el lupus, entre otras. 

Existen 4 tipos de ATR:

1 – Distal

2 – Proximal

3 – Híbrida (combinación de 1 y 2)

4 – Forma de Distal poco común con 5 sub-tipos.

Los Síntomas

Cada caso de ATR es diferente y pueden presentarse desde uno sólo hasta todos los síntomas:

• Retraso en el desarrollo:  estatura y/o peso bajos
• Nauseas y/o Vómitos
• Hiporexia (falta de apetito)
• Estreñimiento,  en la mayoría de los casos,  o Diarrea
• Hipotonía muscular (falta de tono muscular) que puede llevar a retrasos en el desarrollo motriz o dificultad para masticar
• Retraso en el  Desarrollo Psico-Motor (DPM), como la movilidad, la dentición, el lenguaje, etc.
• Nefrocalcinosis (depósitos de calcio en los riñones)

Diagnóstico y Tratamiento

Ante la sospecha de que un niño sufre de ATR, se realizan análisis de sangre y de orina, seguidos de un ultrasonido renal y rayo-X de edad ósea. Un nefrólogo pediatra es el indicado para dar el diagnóstico y tratamiento, con el fin de compensar el desbalance bioquímico sanguíneo y la pérdida de bicarbonato, calcio o potasio en la orina.

La ATR Distal se trata con una solución de citratos, la ATR Proximal con solución de bicarbonato. El médico determina la dosis según los niveles de CO2 en sangre y el peso del paciente. 

Pronóstico y Efectos Secundarios

Durante la infancia, existen etapas en el crecimiento cuando los riñones pueden madurar y comenzar a funcionar correctamente por sí solos. Si no lo hacen antes de o durante la pubertad, el paciente seguirá tomando tratamiento por el resto de su vida.

Los niños con ATR suelen ser pequeños y delgados. Su sistema inmunológico a menudo es débil y pueden enfermarse seguido. Sin embargo, pueden llevar una vida normal siempre y cuando sigan el tratamiento.

Es fundamental llevar un seguimiento frecuente durante la infancia, cuando el organismo está en desarrollo. Si la ATR no es tratada adecuadamente, el exceso de ácido en la sangre puede causar raquitismo. La nefrocalcinosis no controlada puede llevar a fallas renales.